Parroquia San Juan María Vianney

 

 

 

 

Así llamado por estar construido con elementos en desuso, que normalmente almacena en un galpón el hombre de campo, como: maderas, cueros, sogas, clavos, alambres, cadenas, etc.

 

El primer Cristo con éstas características fue realizado en el año 1995 a pedido de la señora Norma Viola, Directora del Ballet Folklórico Nacional, para la teatralización de la obra «El Martín Fierro», cuya coreografía fuera ideada por Don Santiago Ayala «El Chúcaro», padrino de los «Bombos De Oro» y amigo de Victor Galipó.

 

A partir de esa fecha se hicieron once imágenes más en diferentes años, coincidiendo la mayoría en haber sido terminadas de construir un día 30. Algunos de estos Cristos fueron obsequiados por su autor, a personas que prepararon humildes santuarios en agradecimiento por haber recibido de El, sanaciones milagrosas.

 

Se debe agregar a esta información que la mayoría de las imágenes que se pudieron localizar, han presentado manifestaciones de sangre, especialmente en su corona.

 

La forma de hacerle pedidos al Cristo Campesino es escribiendo con lápiz con mina de grafito, en un papel blanco y depositándolo al pié de la imagen, en un recipiente de vidrio transparente con agua potable.

 

El autor de la obra es Victor Galipó. El y su esposa, Carmen, y las familias de ambos, agradecen profundamente al Padre Aldo Horacio Magadán haber asumido la responsabilidad de llevar adelante esta devoción y también al Cardenal Jorge Mario Bergoglio por su autorización y el lugar que le ha sido asignado al Cristo en la Parroquia San Juan María Vianney.